A partir de las 22.00 hs., Sevilla tiene hoy una cita especial. No en vano, el FIBES será el escenario de un nuevo concierto de Fuel Fandango. Su irrupción y su consolidación son de las grandes noticias de la música española en los últimos tiempos. Gatrópolis ha tenido la oportunidad de hablar con Ale Acosta, para adelantarnos lo que podremos ver y escuchar esta noche y para revisar la trayectoria de un dúo que completa Nita.

Hoy presentáis en Sevilla vuestro cuarto disco, Origen, dentro del ciclo Kultura&Co ¿cómo están siendo estos conciertos de presentación? ¿Qué vamos a ver en él?
Están siendo conciertos muy emocionantes, porque desde que ocurrió todo esto, no pensábamos que volveríamos a tocar tan pronto. Todo pintaba muy mal y de repente hacer algunos conciertos ha sido una alegría. Aunque todo es diferente, con más medidas de seguridad, la gente sentada en sillas con su mascarilla… Pensábamos que iba a ser todo mucho más frío, pero todo lo contrario. Siguen siendo conciertos muy llenos de emoción y energía. Están siendo experiencias diferentes, pero buenas.
Son momentos de incertidumbre, y el sector de la música y los eventos lo está notando mucho, ¿cómo lo estáis viviendo?
Va por rachas. Nosotros llevábamos preparando el lanzamiento de Origen, que se publicó en enero, desde hace casi un año, y con vista a la gira de conciertos que teníamos, como 60, y todo se cayó. Pero por otro lado piensas en que ya se hará, y que lo importante es que estemos bien. Luego te das cuenta de que los eventos en sí son muy seguros, y mucha gente ha trabajado para que sea así. También ves a veces que algunas instituciones suspenden conciertos sin ningún sentido. Y son sentimientos en contra de impotencia y a la vez de aceptar la situación.
En enero, como dices, publicasteis Origen, vuestro cuarto álbum, ¿qué podemos encontrar en él?
Es una mezcla de electrónica y flamenco, que son los elementos que siempre están en nuestra música, pero esta vez con un aire de elementos africanos. En la última gira hicimos varios conciertos en África, y no venimos de allí con muchas influencias de los ritmos africanos, y los hemos introducidos en este disco. Es ese matiz diferente que tiene Origen.
¿Por qué Origen?
Justamente es el mensaje que queríamos dar con el disco, y que muchas de las letras giran entorno a eso, es como que nos gustaría volver a los orígenes de las cosas. Muchas veces con las tecnologías y este ritmo de vida estamos desconectados de lo que nos rodea, de la naturaleza, de nuestro entorno. Y el mensaje es el de volver al origen. Eso también está enlazado con lo de la música africana y su percusión, que es el origen de la música. Todo se unió y la palabra origen lo reflejaba muy bien.
Cuando se sale de uno de vuestros conciertos se tiene la sensación de haber vivido toda una experiencia. No son conciertos al uso, ¿cómo los ves tú?
Para nosotros la idiosincrasia de este grupo es el directo. Y no son solo conciertos, son un show, donde la puesta en escena y la escenografía tienen mucha importancia. Cada concierto es como si fuese el último, y hoy más que nunca, porque no sabemos cuándo volveremos a tocar [risas]. Pero, sobre todo, la energía que desprenden las canciones; se las queremos transmitir a la gente tal como son. Nos dejamos la piel en cada concierto, porque creo que ahí es donde está la verdad, encima de un escenario.

Desde que Nita y tú creasteis Fuel Fandango, el crecimiento de la banda ha sido enorme, ¿cómo habéis vivido todo este viaje hasta el día de hoy?
Nosotros ya llevamos once años, y lo hemos visto muy poco a poco. Hemos ido pasando todas las etapas. No ha sido un boom sacar un disco y conocerte todo el mundo. Ha sido poco a poco pero siempre en ascensión; cada vez más público y la gente más interesada en nosotros. Al final son cuatro discos, y hemos disfrutado de cada fase. De ir a tocar a una sala para 50 personas a hacerlo ante miles y miles de personas. Todo eso lo hemos ido disfrutando poco a poco y eso es lo bueno, que sabemos disfrutar del momento en el que estamos.
Y tras cuatro discos y más de una década con este proyecto, ¿en qué punto os encontráis?
A pesar de esta situación, estamos muy ilusionados con el proyecto. Pensamos que todavía nos quedan muchas cosas por hacer y que contar. Se puede pensar que después de cuatro discos ya no sabes qué hacer con el discurso, pero es al revés, se nos abren más puertas, más influencias, más colaboraciones… Estamos siempre maquinando y cada vez tenemos más ganas de hacer cosas nuevas.
Habéis dado conciertos en Australia, Brasil, Argentina, China…, has mencionado África, ¿cómo se percibe vuestra música fuera de nuestro país?
Lo que nos hemos encontrado ha sido muy parecido a lo que vemos en España. Al final, la música es universal. Fuera, el rollo más flamenco les resulta más exótico, y mucha gente viene atraída por eso. Pero digamos que la respuesta es muy parecida, la gente lo percibe igual, y cada vez que salimos es una sorpresa muy grata y son experiencias muy chulas.
Lo más reciente de Fuel Fandango ha sido el tema ‘Nuevo Mundo’, junto a Juancho Marqués, que además ha venido acompañado por un videoclip, ¿cómo surge esta colaboración?
Juancho nos vio tocar hace unos años en un festival en el que también tocaba él. Le gustó la banda y surgió la posibilidad de conocernos. Quedamos un día, nos conocimos, y es de esos momentos en los que enseguida conectas con una persona. Fue automático, conectamos los tres, Nita, Juancho y yo. Nos pusimos en el estudio a tocar y a componer, y en una tarde salió ese tema. Hablábamos el mismo lenguaje todos. Eso al final es lo bonito de la música, que te lleva a conocer a gente como Juancho. Es un tío con un talentazo increíble, que está para borrar los clichés que hay con la música urbana. Es un tipo abierto de mente, que está muy cercano a nosotros musicalmente. Ha sido una suerte que nos cruzásemos y que hiciéramos este tema.