El 9 de abril se publicó Intimidad improvisada (Espasa), donde el escritor natural de Utiel nos vuelve a regalar un pedazo de sí mismo, de sus pensamientos y de su alma. En esta ocasión no se trata de una novela como tal, sino de una recopilación de artículos publicados por Máximo Huerta en sus diferentes colaboraciones en diarios.
El periodo que comprenden estos escritos es desde 2016 a 2018. Y en él se abarca diferentes momentos en la vida del escritor y periodista, con sus altos y sus bajos, con sus dudas, sus aciertos, sus fracasos, sus reflexiones… Su vida, en definitiva. Porque Máximo Huerta lo ha vuelto a hacer, nos ha abierto su corazón de par en par, como ya hiciera en anteriores trabajos como La parte escondida del iceberg (2017). A través de sus columnas en El Español y en 20 minutos aprendemos más sobre él y su manera de entender y vivir el mundo que le rodea.
Huerta toca temas de diversa índole como la falta de empatía en la sociedad actual, cómo han cambiado el estilo de vida, las relaciones personales, las familias, las nuevas tecnologías, el sentimiento de amor hacia los animales (sobre todo hacia su perrita Doña Leo), el cine, la literatura, la vida, la muerte, los recuerdos o la infancia, entre muchos otros. Los diferentes artículos están divididos en apartados en los que se agrupan los de una misma tendencia, por lo que el orden de lectura puede ser el que queramos.
Incluso en Intimidad improvisada se vuelve a repetir uno de los rasgos de la literatura de Máximo Huerta. El escritor tiene siempre muy presente de dónde viene, cuáles son sus orígenes, su infancia, y por encima de todo las personas que formaron parte de ella, y que más le han influido a ser quien es. Ya sea en ficción o en realidad (como el caso de este último trabajo) el valenciano le brinda un papel muy importante a la figura de la madre y de la abuela. Para las que siempre tiene reservadas las palabras más bonitas y especiales de sus obras.
Cabe añadir que los artículos están acompañados de unas ilustraciones firmadas por el propio escritor, y que el diseño de su portada es obra de Sara Morante.