En los medios de comunicación nos hablan mucho en los últimos tiempos sobre la denominada España vacía. Pueblos de nuestro territorio nacional que van quedando cada vez más solitarios y más desatendidos por parte del Estado y las comunidades. Todo el mundo coincide en lo urgente de solucionar esta problemática, que nos incumbe a todos. Pero lo cierto es que de momento, ni se evita ni se arregla. Con este trasfondo construye Luz Gabás su nueva novela, El latido de la tierra (Planeta, 2019).

Alira es la protagonista de esta historia, donde la autora nos muestra un abanico de temas y sentimientos muy actuales, cuestiones y sinsabores que trae perdida a una gran parte de nuestra sociedad. Estamos ante una mujer de mediana edad, que siente que la vida se le ha escapado al cuidar de su familia y de la mansión centenaria en la que vive. Una herencia familiar, que más bien podía entenderse como una maldición, más que como un legado del que enorgullecerse. Alira ha visto a sus amigos abandonar el pueblo que en el que se han criado, les ha visto seguir cada uno su camino, desarrollarse profesionalmente… Pero ella, décadas después sigue en el mismo lugar, haciendo lo mismo que ha hecho hasta la fecha, y con pocas opciones de cambiarlo.
Como en la vida de nuestra protagonista, la mansión Elegía se convertirá en el centro de El latido de la tierra, por donde transcurrirán todas sus tramas, y donde comprendemos, a través de sus diferentes personajes, que nunca llegamos a conocer a esos a los que tenemos más cerca. Esta casa, situada en el pueblo ficticio de Aquilare, se encuentra en grave peligro, debido a la intervención del Estado décadas atrás en esas tierras, lo que propició el exilio y la desaparición de dicha localidad. Esto provoca que su mantenimiento sea insostenible para Alira, lo que le hará buscar soluciones que contribuyan a asegurar su supervivencia, que pende de un hilo.

El letargo en el que vive Alira se romperá cuando sus amigas le dan la idea de alquilar habitaciones para poder costear los gastos de la mansión Elegía. Lo que supondrá un reencuentro con los amigos de su pandilla de juventud, y un giro radical en su vida. No solo por los acontecimientos que vivirán todos ellos, sino por la revolución interior que supondrá para ella. Además, un grupo de personas tomará las ruinas de Aquilare para devolverle al pueblo su vida. Todo esto generará que Alira se cuestione la vida que ha llevado hasta el momento, dándose cuenta de que ella también tiene derecho a ser feliz, algo que no había conseguido hasta el momento. Incluso le llevará a unos límites y derribar barreras y prejuicios que en cualquier otro momento hubieran sido impensables para ella.
El latido de la tierra es un viaje a la España rural, a nuestros orígenes, a la historia de muchos de nuestros antepasados. Una España que intenta reponerse de un olvido producido por el Estado, las crisis económicas o los cambios en los estilos de vida, entre otros casos. Luz Gabás, residente actualmente en Benasque, en las montañas del Pirineo aragonés, nos da las claves de una vida en un pueblo. Nos expone los pros y los contras de una vida volcada por y para el campo. Y es un viaje a nuestro interior, a través de los ojos de Alira y sus amigos, en los que cualquiera nos podremos reflejar, ahora o en un futuro. Una novela que nos habla de la pasión, de la lealtad a los nuestros y a nuestras raíces, pero sobre todo a nosotros mismos.
Todo ello amenizado por una playlist diseñada por la propia Luz Gabás, donde cada capítulo es abierto por un tema de artistas que van desde Rolling Stone hasta Viva Suecia, pasando por Elvis Presley, Lady Gaga, Foo Fighters, Pearl Jam, David Bowie, Bruce Springsteen o Harry Styles, entre muchos otros. Y que se puede encontrar en Spotify.