A pesar de su juventud llevan varios años en el mundo de la interpretación. Pero ha sido la ópera prima de Guillermo Rojas, Una vez más, la que los ha dado a conocer más ampliamente. Jacinto Bobo y Silvia Acosta hablan de ellos y de los personajes que encarnan en el filme.

¿Qué ha supuesto para ti participar en Una vez más?

Silvia Acosta: Bueno, en mi caso es el primer largometraje que hago. Me encanta que sea una historia contada por gente de Sevilla, con el marco de la ciudad dándole tanta importancia… por supuesto, estrenarla aquí (en el Festival de Cine de Sevilla) … Es muy emocionante. Además, en el caso de mi personaje, con el que me he sentido fácilmente identificada desde el principio, por la historia que cuenta, e incluso personalmente, por la encrucijada vital en que se encontraba, por la importancia de las relaciones personales que tiene en Sevilla, o por decidir continuar con la vida que lleva aunque sea fuera de aquí, con lo que es sacrificar cuestiones personales que tanto le suponen. Así que hay muchos elementos especiales alrededor de esta película. 

Tú (Jacinto) transmites mucha tranquilidad con tu personaje, Daniel, aunque las circunstancias que le tocan vivir en la película sean muy complejas. ¿Realmente eres así en la vida real?

Jacinto Bobo: (Risas). Sí, en general, sí. Es verdad que anteriormente no había trabajado nunca en un tono tan naturalista, pero sí, en mi vida soy muy tranquilo. Y me parece muy bien porque, evidentemente, es un momento que a los dos nos toca personalmente; quizás más desde la posición del personaje de Silvia (Abril), pero me gusta eso de poder defender una vida más tranquila, una forma de ver la vida muy asociada al sur, en este caso. 

Al comienzo de la película se percibe el cambio que se produce entre los días grises y lluviosos de Londres con los cálidos y soleados de Sevilla, cuando Abril se desplaza de una ciudad a otra. Ese contraste que se produce, ¿puede ser el que se da en tu personaje tras estar alejada de su ciudad durante cinco años?

Silvia Acosta: Claro, claro. Las dudas que Abril tiene sobre la decisión que tomó cuando se marchó, sobre si acertó en su momento, con todo lo que dejaba atrás. Y el marco de la ciudad lleva mucho a eso… Fue curioso porque cuando grabamos en Londres, el equipo quería que estuviera nublado y lloviera. Y justo nos llovió. Se sincronizó incluso ahí (risas). Pero, claro, utilizar todo eso que aporta la ciudad, para los que somos de aquí, sentir su clima, verla en primavera, volver a ella, en abril, en mayo… supone mucho.

Y, además, tu personaje tiene el nombre del mes típico de Sevilla, Abril…

Silvia Acosta: Claro. Un mes que tiene una luz y un clima especial. Es algo que es muy propio de aquí, que no se da en otros lugares como en Londres. Pero quedarse en Sevilla a pesar de todas esas cuestiones positivas le supone a Abril aceptar unas condiciones laborales que no son las que ella quería. 

Daniel y Abril son el reflejo de una situación precaria que vivís los jóvenes en relación con el mercado laboral.

Jacinto Bobo: Sí, pero aun así no es una película de tesis. O sea, por encima del momento vital o del retrato generacional, que lo hay, la película, en el fondo, es una relación entre dos personas. Y es un momento en el que se puede ver reflejada cualquier persona. A todos nos ha pasado. Si realmente hicimos lo correcto, si no, si seguimos siendo esa persona, si la otra persona sigue siendo la misma… Creo que el dilema que se va a plantear durante toda la peli es muy local, muy guay, pero por eso, muy universal.

Ambos mantienen una relación de buenos amigos, de dos personas que fueron pareja, pero que no terminaron muy bien. También supone un canto a la concordia, ¿verdad?

Jacinto Bobo: …vamos a llevarnos bien (risas). Es un poco lo que el amor debería suponer. Si has querido a alguien y esa persona desaparece de tu vida o te alejas de ella, en teoría eso no tendría que cambiar. Lo lógico es querer lo mejor para esa persona, esté contigo o no. 

¿Cómo ha sido el trabajo con Guillermo Rojas, el director?

Silvia Acosta: Muy fácil. Ha sido muy gustoso. Guillermo es un director que confía mucho en su equipo, delega mucho en él, lo cual enriquece el proyecto. A nosotros como actores nos ha dado muchísima libertad a la hora de proponer, de escucharnos… Ha sido un trabajo muy rico.

Es bonito que se cuenten historias en nuestra tierra, que al igual que en otros cines, podamos disfrutar de tramas reales y cotidianas.

Jacinto Bobo: Sí. Inevitablemente, en la película se cuentan cosas y entre ellas está tu ciudad, de donde eres. En un momento en el que es complicada la convivencia, desde Andalucía siempre se ha defendido una forma de entender lo que somos, de una manera pacífica y desde el entendimiento, y de alguna forma, eso se ve en la película.

¿Tenéis algunos proyectos profesionales a la vista que se puedan contar?

Silvia Acosta: Sí, pero sobre todo en Madrid, de teatro… 

Jacinto Bobo: Sí, mucho teatro, por suerte. 

Silvia Acosta: Por suerte, total (risas).

Jacinto Bobo: Al final lo audiovisual es lo que te configura, y en mi caso, y creo que también en el de Silvia, la base está en el teatro. Es fantástica la cercanía diaria y constante con el público. En cine, esta película ha sido el estreno más potente, y encima en mi casa, lo que la hace más especial. 

Y, además, en Una vez más los personajes hablan sin tapujos con el acento andaluz, sin necesidad de maquillarlo…

Silvia Acosta: Eso es algo que está aceptándose cada vez más. Antes, a los actores nos pedían neutralizar el acento, castellanizar, y de un tiempo a esta parte, sobre todo en audiovisual, se está viendo mucha más variedad de acentos.

Jacinto Bobo: Es una forma de ver que vivimos en un país muy diverso y, por suerte, también tenemos esa oportunidad. Y eso debería estar reflejado en el cine, evidentemente. Es absurdo que no haya ocurrido antes.

Fotografía de portada de Patricia del Zapatero.