'Irene Mala: “Me interesaba, más que Tim Burton en sí, cómo se conformó, quién es él y el porqué de que sea así”'

Irene Mala es una ilustradora y pintora de Sevilla. Con un estilo inimitable, nos adentra en el mundo de Tim Burton en su último trabajo, titulado El Universo Tim Burton (Lunwerg Editores). Un libro en el que la sevillana nos desgrana este universo tan peculiar en todas sus facetas (actores fetiches, películas, vestuario, escenografía) desde su particular visión. 

El Universo Tim Burton (Irene Mata, 2020)

¿Cómo nace este proyecto con Lunwerg Editores?

La editorial tiene una colección de libros dedicados a directores de cine. Empezó con el de Wes Anderson, que lo hizo Nuria Díaz. A partir de ahí me ofrecieron a mí hacer el segundo, que es este de Tim Burton. Fue un encargo de la propia editorial. Pensarían en mí para hacer este trabajo porque supongo que verían cierta similitud con mi obra y mi forma de representar los personajes. Es verdad que huyo de la normalidad, me regodeo en el humor negro, en la sátira y lo sórdido. Quizás por ahí pensaron que podía hacer un buen Tim Burton, y me ofrecieron el proyecto que ha sido sumergirme de lleno en él. Ha sido una gozada.

Es muy curioso después de ver tus ilustraciones y su filmografía, cómo casais a la perfección Tim Burton y tú.

Pues sí, salvo por los ojos que a mí me encanta pintarlos grandes. A ver, yo también he navegado mucho por sus aguas. Estaba claro que iba a hablar de Tim Burton, y su esencia debía estar ahí muy evidente. He reflejado, o he intentando reflejar, al máximo lo que viene siendo su estética. Pero reintrepretando y analizando todo lo que es Tim Burton.

Aunque fuera la editorial la que quiso que reinterpretaras el mundo de Tim Burton, ¿cómo fue encontrarte con él y no con otro director?

La verdad es que me hizo mucha ilusión. Primero me dio pánico escénico, dije “oh dios mío”, porque Tim Burton es un director de culto, con mucho nombre y trayectoria. Sobre todo el ver cómo me enfrentaba. Después vino el volumen de trabajo, tiene muchas películas. El grueso del trabajo era bastante gordo, pero por otro lado, era muy motivador porque me encantan sus películas, sus historias, su discurso. Entonces me emocionaba mucho ponerme a trabajar, lo hacía con mucho ánimo. 

Ahora hay muchos ilustradores que crean sus propios libros sobre artistas, pero el tuyo es llamativo. Respecto al volumen de trabajo que comentas, ya que cubre todos los detalles de la filmografía de Burton: vestuario, escenografía, actores fetiches, películas concretas… ¿cómo ha sido el proceso de crear y que no se te escape ni un detalle?

Me interesaba, más que Tim Burton en sí, cómo se conformó, quién es él y el porqué de que sea así. Su historia obviamente me interesa porque queremos conocer al personaje, pero realmente me interesaban sus influencias, todo lo que le rodea, de dónde viene y de dónde ha sacado toda su formación. Eso es quizás lo que más me ha cautivado y me ha motivado mucho. Después, no quería centrarme en lo típico de su vida personal y privada. Lo realmente atractivo de Tim Burton es su trabajo como cineasta, y he querido profundizar más en ese aspecto.

De todo lo que has analizado, ¿qué es lo que te ha resultado más exigente?

Lo más difícil, pero no por complejidad sino por pensar que me estaba metiendo en aguas turbulentas, era el tema de la crítica de cine, porque yo soy pintora e ilustradora. Puedo defenderme con el texto, pero al hablar de cine en sí me daba mucho respeto. Que alguien dijera “¿qué hace esta hablando de Tim Burton cuando no es nadie?”. En eso me sentí menos segura, por decirlo de alguna forma. Porque no siento que yo tenga que hacer una crítica de cine, pero aun así me he planteado mi opinión pero sin adentrarme demasiado en ese aspecto.

Cuando se habla de Tim Burton siempre se nos plantea el debate de “normalidad vs ser diferente”, aunque esa línea cada vez está más difusa…

Sí, la revisión del cine de Tim Burton evidencia un tema que hoy está de máxima actualidad, que es la aceptación de la diversidad, de una sociedad plural. Y es verdad que hoy en día el tema está candente. Es algo que además es muy evidente. Si te pones a revisar alguna serie es muy normal ver esta diversidad. Pero en el momento en el que Tim Burton empezó a hablar de esto fue hace 30 años, no era tan normal. La gente quería ser del montón porque se encontraba segura. Y él nos ofrece un abanico de outsiders, de frikis, de raritos… que viendo sus películas, al final son con los que quieres estar. El chico popular deportista se te hace antipático; a ti te gusta el raro porque es el guay. A mí es lo que más me atrapa del cine de Tim Burton, el discurso del raro.

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