En la presente edición del Festival de Cine de Sevilla ha sido presentada la segunda temporada de la aplaudida serie de televisión de Movistar+, La peste. Tres personajes potentes como los de Juana, Escalante y Eugenia son explicados por las actrices que los encarnan, Melina Matthews, Claudia Salas y Cecilia Gómez, respectivamente.

Entre los nuevos personajes que encontramos en esta temporada están Juana (Melina Matthews) y Escalante (Claudia Salas), ¿qué nos podéis contar sobre ellas?
Melina Matthews (Juana): Mi personaje es Juana del Águila, es la esposa de Pontecorvo (Federico Aguado), el nuevo Asistente de Sevilla, y ejerce de consejera. Ella no tiene mucho contacto con la calle, vive en sus aposentos, y cuando él regresa cada día de trabajar le expone los problemas que están teniendo, se escuchan… Y ella ejerce su influencia sobre él como gran pareja de poder, diciéndole lo que tiene que hacer con La Garduña.
Claudia Salas (Escalante): Mi personaje es Escalante, es una chica muy joven, que ejerce la prostitución en la mancebía, lo que hace que sufra un desahucio. La echan porque descubren que tiene una enfermedad, que es la sífilis, y entonces no les sirve. Cuando piensa que todo está acabado, que todo está perdido y que va a morir tirada en la calle, aparece su ángel de la guardia. Un personaje que jamás pensaba que lo podría ser, y es el que interpreta Jesús Carroza, Baeza. Emprenden un camino muy bonito siendo compañeros. Son personajes que nunca han recibido nada, por así decirlo, no tienen una inteligencia emocional mínima, no saben lo que es querer y que les quieran, ni les han cuidado nunca. Y de repente se encuentran solos y empiezan a ayudarse. Cuando ella comienza a recuperarse un poco, lo que quiere es que las mujeres de su alrededor no pasen por lo que ella ha pasado, mejorando las condiciones de higiene, laborales, de salud, etc. de todas las prostitutas que están a su lado. Es muy bonito, porque va creciendo y a mí me ha aportado mucho Escalante. Estoy muy contenta.

A Eugenia (Cecilia Gómez) ya la conocemos de la primera temporada de La peste. En ella ejercía de modelo para un cuadro de Teresa, ¿en qué momento se encuentra en el comienzo de esta segunda? ¿cómo le ha influido todo lo aprendido junto a la pintora?
Cecilia Gómez (Eugenia): Han transcurrido cinco años, Eugenia ya ha dejado la mancebía y se convierte en la mano derecha de Teresa. Junto a ella y a Valerio (Sergio Castellanos), en esta nueva temporada lleva a cabo una lucha, un poco como Escalante, para que las prostitutas tengan sus derechos.
Uno de los aspectos más importantes de La peste tiene que ver con los personajes femeninos que se sitúan en sus tramas. Mujeres fuertes e independientes, con ideas a priori modernas para la época en la que está ambientada la serie, ¿qué opináis sobre ellos?
Claudia Salas (Escalante): Yo sí me creo que hubiera mujeres en la época con ese tipo de pensamientos, incluso con más. De hecho, es una suerte poder interpretar a estos personajes femeninos, que se les dé visibilidad para que se sepa que existieron, y que se les dé voz.
Melina Matthews (Juana): Claro que existían, pero la historia los ha ocultado.
Claudia Salas (Escalante): De hecho el personaje de Escalante está inspirado en una mujer que existió. Una prostituta que intentó por todos los medios luchar por las condiciones de las mujeres, y acabó siendo la madre de la mancebía. Cosa que era inviable por aquel entonces, porque tenía que ser un hombre, y ella terminó siendo la primera madre de la mancebía de Sevilla. Me parece muy bien que la trama vaya muy de la mano de ellas en esta temporada.
Melina Matthews (Juana): La pareja que formamos no era tan inusual. De hecho creo que Juana llega a ser más política y estratega que Pontecorvo.
Claudia Salas (Escalante): Él pone la cara, pero ella pone la mente.
Melina Matthews (Juana): Claro, y esto pasa aquí, pasa allí, pasa ahora y hace 400 años. Pero está bien que se visibilice y que se cuenten esas historias.

¿Cómo ha sido para vosotras adentraros en el siglo XVI? ¿Cómo ha sido la preparación de vuestros personajes?
Cecilia Gómez (Eugenia): Primero, con una documentación previa con Pedro Álvarez, el historiador de la serie. Nos ha ayudado mucho, y todo el trabajo se facilita mucho. También ha influido el plató, el vestuario… te facilita mucho a la hora de entrar ahí. Yo lo asemejo a la situación que se vive actualmente, que poder encarnar este tipo de personajes ahora que está muy latente la lucha de la mujer, de la visibilidad de la igualdad, al final es un regalo porque comprendes muchas cosas. Documentándome para mi personaje he descubierto cosas que no sabía, y que a mí como Cecilia me ha ayudado en temas como poderes en la sombra o todo lo que se lleva pasado, y que ahora no hay cosas como entonces, pero hay matices que siguen. A mí me ha ayudado para coger fuerzas y seguir teniendo una voz para luchar contra eso.
Melina Matthews (Juana): Sobre todo, el trabajo previo que se hizo en todos los departamentos nos ayudó un montón. Primero a visualizar cómo vivían esas personas, esas mujeres en esas condiciones… En mi caso, llevaba un maquillaje casi inexistente, corsé, aprender a respirar, aprender a caminar como lo hacían las mujeres de clase alta en la época, los palacetes en los que grabábamos, toda la ambientación… Todo suma. Y evidentemente te hace mucho más fácil tu trabajo. Pedro, el historiador estuvo con nosotras durante todos los ensayos y las lecturas de guion, contestaba cualquier duda que tuviéramos, lo cual fue de una grandísima ayuda también.
Claudia Salas (Escalante): Ya lo hemos dicho, pero cada departamento funciona como un engranaje perfecto y lo hace muy fácil. Entonces a la hora de creerte que estás en el siglo XVI, no te hace falta creértelo, porque ya estás allí. El trabajo de arte, de vestuario, Yolanda Piña, jefa del departamento de maquillaje, es increíble. A mí me ayudó muchísimo con la caracterización. Y luego es una suerte. Esta profesión nos permite vivir otras vidas y otras épocas. Haber podido encarnar a un personaje del siglo XVI en Sevilla, sentirte como se sentían, vivir como vivían, oler como olían… El departamento de arte ponía incienso y velas que te ayudaban a la creación de espacios, y es maravilloso y muy sencillo por la parte de trabajo en equipo que se hace en este proyecto. Al final es un regalo.

En una época y un sitio tan complicados como la Sevilla del XVI, donde había unas condiciones muy duras de vida, de higiene, de salud… La peste nos ofrece unos personajes que se enfrentan y le plantan cara a ese destino que les ha tocado vivir, ¿se podría hablar de unos supervivientes?
Claudia Salas (Escalante):El mío personalmente, sí. Está constantemente intentando conseguir su objetivo que es vivir a todo. También parte de unas condiciones complicadas, de una enfermedad que era y sigue siendo mortal, de una clase social de pobreza extrema, entonces no se puede permitir el lujo de hacer planes de futuro, y va viviendo el día a día. Lo bueno es que de repente encuentra un halo de luz y sí que por primera vez puede pensar en un futuro o por lo menos en dejar huella. Y a ayudar al aquí y ahora, a lo que está pasando, por lo que ella está atravesando. ¿Y el tuyo? (A Cecilia).
Cecilia Gómez (Eugenia): El mío ídem (risas).
Melina Matthews (Juana): El mío no es tan ídem (risas). Juana es una persona que calcula, ella planifica. Eso es largo plazo. Ella va en busca de mantenerse en su estado y de mantener ese poder que tiene y llegar a ser parte de la corte. Ella lucha para seguir manteniendo su estatus. Es muy ambiciosa, que no es mala la ambición, pero ella actúa así.
Fotografía de portada de Andrea del Zapatero.