«Hace años que vivo con la muerte cerca». Chile, septiembre de 1986. 15 años de dictadura de Augusto Pinochet tiene al pueblo chileno sumido en la desesperación. En esa situación emergen Ramiro y Tamara, quienes planean el magnicidio (Operación Siglo XX) del tirano que accedió al poder con el golpe de estado de Salvador Allende. Los guerrilleros del Frente Patriótico Manuel Rodríguez toman una arriesgada decisión: Matar a Pinochet. Con esta película, incluida en la Sección Oficial, se ha inaugurado el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva de 2020. Al igual que el resto de certámenes cinematográficos, marcado por la pandemia de la Covid-19.

Matar a Pinochet, dirigida por Juan Ignacio Sabatini, está basada en hechos reales, en la fallida Operación siglo XX que pudo cambiar radicalmente la historia: «Mañana vamos a hacer un acto de amor porque hay actos de amor que se hacen con lanzacohetes… Esta operación se llama Siglo XX porque vamos a cambiar la historia, la nuestra, la de todos…». Los idealistas miembros del Frente Patriótico Manuel Rodríguez se conjuran para llevar a cabo sus planes dentro de la política adoptada de tomar el camino de las armas para derrocar a Pinochet.
En el reparto aparecen Daniela Ramírez, Cristián Carvajal, Juan Martín Gravina, Gabriel Cañas, Gastón Salgado o Julieta Zylberberg. Esta coproducción de 2020 realizada entre Chile, Argentina y España (Villano Producciones, Sudestada Cine S.R.L. y Potenza Producciones) ha sido guionizada por Enrique Videla, Pablo Paredes y Juan Ignacio Sabatini. La música, gran acompañante en algunas escenas de gran tensión, ha sido compuesta por Julieta Naranjo, mientras que la fotografía es de Enrique Stindt.
La voz en off de la comandante Tamara, Cecilia Magni, es el hilo conductor de este drama político que recurre a veces al flashback para recordarnos qué ocurrió en aquella operación y para lanzar una pregunta clave: ¿qué hizo que la Operación Siglo XX saliera tan disparatadamente mal?

Mención especial en Huelva
El jurado de Radio Exterior de España ha otorgado a Matar a Pinochet una mención especial “por reivindicar un cine político que forma parte de los orígenes del Festival Iberoamericano de Huelva y porque su protagonista no es Pinochet, sino esos jóvenes guerrilleros que querían cambiar la sociedad y derrocar a un dictador. Una película que tiene también conexión con el momento actual de Chile, que acaba de aprobar en referéndum derogar la Constitución vigente desde Pinochet y redactar una nueva. Una cinta que ha tenido la valentía de estrenarse en salas en uno de los peores momentos para la industria por la pandemia”.