'Camarón: Flamenco y Revolución (2018)'

Es evidente que no todos los artistas son iguales. Podemos hablar de buenos cantantes, pintores, escultores, escritores… pero si el arte que destilan  no llega al público o al espectador, si no logra pellizcar, provocar sentimientos, no cumple su verdadero objetivo. No se trata de ser ortodoxo, sino de emocionar, transmitir. Y José Monje Cruz, Camarón, fue un privilegiado porque a sus innatas condiciones supo unirles ese duende que no todo el mundo posee. Y si encima tuvo la valentía y visión suficientes para romper con lo establecido en el ámbito del flamenco, hablamos de un artista indiscutible e irrepetible. De esos cuyos moldes se rompen una vez están hechos, para que nadie más pueda ser igual que ellos. Porque Camarón logró abrir el complejo mundo del flamenco también a aquellos que jamás se habían acercado a él, bien por falta de interés, bien por puro desconocimiento.

Camarón: Flamenco y Revolución (2018)

El pasado 1 de junio de 2018 fue estrenada una película documental que recorre linealmente la trayectoria vital y profesional de un artista único. Camarón: Flamenco y Revolución es el resultado del trabajo bien realizado, y donde la admiración y el respeto por la figura de Camarón quedan patentes. Bajo la dirección de Alexis Morante se ha gestado una obra que pasará a los anales. Desde el nacimiento en San Fernando de José Monje Cruz en el seno de una humilde familia gitana, propietaria del don del arte flamenco, hasta la irrupción de un joven que llamará pronto la atención con el nombre de Camarón de la Isla, quien tendrá la capacidad de conquistar a todo tipo de público con esa revolución a la que se alude en el título del documental y que le reportó fuertes críticas por parte de los puristas del flamenco. Ello supondrá el definitivo  nacimiento de Camarón.

Camarón: Flamenco y Revolución (2018)

Una ruptura importante

Un narrador de postín como Juan Diego, con un acentuado andaluz que ayuda sobremanera a meterse aún más en la película, Camarón: Flamenco y Revolución es una bella historia de superación, de elogio al mundo gitano, de universalización del flamenco a partir de una ruptura con el pasado y la ortodoxia que muchos no quisieron aceptar, pero que abrió las puertas a una manera distinta de ver y sentir el arte.

Como decimos, Camarón: Flamenco y revolución es todo un legado que podrá servir para que las futuras generaciones conozcan a un hombre que con su arte y su espíritu rompedor llevó el flamenco a todo el mundo.
Durante 104 minutos vemos pasar ante nosotros a las personas que le acompañaron en vida, desde sus padres (Juan Monje y Juana Cruz) a su esposa (Dolores Montoya), pasando por grandes del flamenco como Manolo Caracol, Antonio Mairena o Juanito Valderrama, o esas otras personas que fueron clave en su desarrollo profesional, como Paco de Lucía, su hermano Pepe de Lucía, Tomatito, Paco Cepero o el productor musical, arreglista y compositor sevillano Ricardo Pachón, quien le enseñó un mundo nuevo en su arte.

El guión está escrito por Alexis Morante y Raúl Santos; la música es de Miguel Torres y  Julio Revilla; la fotografía, Juanma Carmona; y la producción ha corrido a cargo de Lolita Films, Canal Sur Andalucía, Mediaevs, FilmStar y Ulula Films.

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Un comentario

  1. Camerón de la Isla, nació del pueblo y para el pueblo. En toda su vida y a pesar de las adversidades trató siempre de mantener su esencia en sus canciones flamencas, la de su origen, su pueblo gitano.
    Desde pequeño enfrentó a la vida, le dio su mejor cara. Cantaba en los trenes, tal vez como otros niños, sin embargo, este camino que no fue fácil, le permitió impregnarse de la naturaleza propia del pueblo andaluz, su cuna.
    Al decir que fue un fenómeno social, no se exagera, pues él trascendió cánones establecidos, fue más allá a través de su canto .Acompañado por grandes de la época en sus conciertos, personas que compartían al igual que él, el sentido de la música flamenca, como lo fue Paco de Lucía lograron que el Jondo se alojara en las personas, formando parte de la identidad y pertenencia.
    Me permitiré hacer alusión a una de sus emblemáticas canciones: Na es Eterno. ¡qué gran verdad!, nada es eterno, nada perdura, nada es absoluto, todo se va, nada regresa cuando se ha ido, no obstante, hay huellas invisibles que quedan en las almas de las personas. Puede pasar el tiempo, veranos e inviernos, podrán caer las hojas y al fondo una música que se escucha de alguien que existió, que saboreo la vida con total intensidad, y ese fue Camerón de La Isla, persona que vivía, y renacía con los compases flamencos , hacía nacer por medio de sus letras el sentir de su gente, su pueblo.
    Desde un país muy lejano, su música, alguien extraña la ha escuchado.
    Victoria Gadir.

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