La historia de la última novela de Rafaela Cano, La senda del Rey, se gesta en la villa de Magacela (Extremadura). Publicada por Grijalbo y Penguin Random House Grupo Editorial España, la obra ganadora del II Premio Caligrama en la modalidad de best seller, nos lleva de viaje entre la historia y la ficción para convertirnos en testigos de varias tramas que entroncan con el origen del decreto de expulsión de los moriscos por parte de Felipe III.
Entre dos credos
Dos religiones conviven en 1609 en un ambiente de crispación, desconfianza, recelos e intrigas. Moriscos y cristianos son protagonistas de La senda del Rey, una novela en la que Rafaela Cano nos sirve de guía para comprender uno de los muchos episodios históricos de nuestro país que nadan entre el olvido y la desinformación. Sin embargo, la autora engancha al lector tejiendo una bella obra por donde se desliza en un paseo lleno de emociones. Sobre la fidelidad histórica y una narrativa sugerente, Rafaela Cano establece el discurrir de las distintas tramas que componen La senda del Rey.
Y como no podía faltar una historia de amor entre tanta convulsión, a Tristán, quien ha de abandonar la aldea, se le quiebra su mundo al ser separado de Mencía. Un oasis de amor entre tanta crispación. Una crispación que había alcanzado su punto máximo cuando en el año 1611, Felipe III pudo, por fin, festejar la expulsión de los moriscos de los reinos españoles, haciéndose eco de ello, como no podía ser de otra manera, en la pequeña aldea de Magacela, donde residen con una minoría de cristianos.
El padre de Tristán, Bartolomé de la Peña, es el paradigma de las distintas uniones generadas entre moriscos y cristianos, pues él, un hombre que gestó una fortuna (poseía entre sus bienes una sedería, un viñedo y un olivar), se había casado con una joven cristiana (Catalina), algo no bien visto entre el núcleo de cristianos viejos, aunque relativamente lógico en una comunidad con personas de distintas creencias religiosas que conviven entre ellas (1.350 moriscos y casi 50 cristianos).
La senda del Rey es otro de los muchos capítulos oscuros de la historia de España, al que la narrativa fluida de Rafaela Cano nos acerca a través de una rica e intensa novela histórica. La senda del Rey es el éxodo de unos habitantes que se labraron un futuro próspero merced a su trabajo y esfuerzo; factores estos que no les sirvieron para ganarse la confianza de sus convecinos.
La autora
Rafaela Cano López nació en Campanario, Badajoz. Se licenció en Filología Hispánica por la Universidad de Extremadura. Actualmente reside en Badajoz, donde es profesora de Lengua Castellana y Literatura en el IES Zurbarán. Ha publicado El Vuelo de la Palabra (2012-2015-2016-2017), Los Ojos de Dios (2015) y La Senda del Rey (2018).
