El historietista y editor estadounidense, creador de personajes como La Cosa del Pantano o Lobezno, falleció el 10 de septiembre, a los 69 años, tras haber sido sometido a varias operaciones de corazón, tal y como él se encargó de compartir con sus seguidores desde su perfil de Twitter. A Len Wein también le debemos una de las novelas gráficas más importante, Watchmen.

DC Entertaiment, a través de un comunicado informaba de esta triste noticia para el mundo del comic. Por medio de esas líneas, la empresa se refería al artista como «un querido amigo que contribuyó durante largo tiempo a la compañía«. Su presidenta, Diane Nelson, también ha tenido palabras de reconocimiento hacia Wein: «Un gigante de la historia cuya carrera creativa sobresale como una de las más prolíficas y significativas de todas«. Compañeros suyos como  Chris Claremont han expresado su malestar por el poco reconocimiento que la industria le ha dedicado a la figura de su amigo, al considerarlo como uno de los pilares de la etapa que vive el cómic actualmente: «La historia moderna del cómic sería completamente diferente si no fuera por Len. Que nadie lo aplauda por ello es una desgracia«.

Len Wein nació en Nueva York el 12 de junio de 1948. Poseedor de una prolífica carrera, en la que ha creado algunos de los personajes más representativos del imperio Marvel, como Lobezno, la generación de mutantes de Tormenta o Rondador Nocturno. El primer trabajo de Wein para dicha empresa fue en 1970, con una historia de un sólo número y con Daredevil como protagonista. Pero para recordar su debut profesional en la industria del cómic hay que remontarse a un par de años antes, cuando en 1968 creó Eye of the Beholder (Los Jóvenes Titanes número 18), su primera historieta para DC Comics. El guionista, un clásico que comenzó en el género de terror, desarrolló su trayectoria entre Marvel y DC, a la misma vez que realizó trabajos para Disney Comics, Dark Horse Comics, o historietas de las series The Simpsons y Futurama.