Agradable, muy agradable visita la que tuvo ayer jueves el Centro Penitenciario Sevilla I. Ni más ni menos que la onubense Rocío Márquez, quien dentro de la programación de la undécima edición de Monkey Week actuó para satisfacción de quienes tuvieron la suerte de presenciar su actuación.

Acto solidario
El concierto de Rocío Márquez supone la tercera ocasión en la que el festival Monkey Week y la ONG Solidarios acercan la música en directo a este sector privado de la misma, tras las gratas experiencias de años anteriores con Nolasco y El Canijo de Jerez como protagonistas. Además, el festival también colabora activamente en esta su undécima edición con otra ONG, Autismo Sevilla, recaudando donativos en su zona profesional destinados a financiar actividades de dicha entidad de carácter cultural. A ello se suma la acción con la referida organización no gubernamental, ya que Monkey Week cuenta con huchas para recaudar fondos para la misma dirigidos a actividades para jóvenes que se desarrollarán durante todo el año.

Un referente anual de la música
El festival de música e industria musical de Sevilla se ha convertido en los últimos años en un referente en el sector por su original apuesta dentro del panorama de festivales, y aglutina hasta mañana sábado a 166 conciertos y showcases en 14 espacios escénicos de la ciudad. Incluye un nuevo escenario gratuito instalado en plena Alameda de Hércules. 127 artistas de 20 países, desde españoles como Los Punsetes, Carolina Durante y Neuman, y extranjeros como Tropical Fuck Storm, Juan Wauters y Lysistrata, están pasando por una edición en la que los sevillanos, según indica el leitmotiv de este encuentro artístico que convierte a Sevilla en una ciudad de la música, podrán descubrir hoy a las bandas del futuro.
Esta edición cuenta con más de 60 conciertos gratuitos, lo que supone una oportunidad también para las familias, ya que se trata de planes culturales abiertos a todo tipo de público que quiera disfrutar de jueves a sábado de la mejor música.
Fotografía de portada de Óscar Romero.