Pablo Sánchez, compositor y cantante de La Raíz, se ha embarcado en su proyecto más personal hasta la fecha. Ciudad Jara nace por la necesidad del artista valenciano de explorar la música desde una perspectiva más íntima, suponiendo una gran liberación para él. Donde nace el infarto es su primer trabajo, que se publica hoy (7 de febrero), aunque ya está recogiendo los primeros frutos, al estar agotadas las entradas (desde hace meses) para sus dos primeros conciertos de presentación. Un camino ilusionante se les pone por delante a esta formación y a su líder. Entre sus primeras citas se encuentran los showcases que dará en Fnac (10/02 – San Agustín Valencia, y 13/02 – Callao Madrid).
Ciudad Jara es la banda liderada por Pablo Sánchez, compositor y cantante de La Raíz, ¿cómo nace este nuevo proyecto?
Nace de una inquietud artística mía. Era compositor para un grupo, La Raíz, pero había cosas dentro que deseaba explorar, y necesitaba transmitir de una manera más personal. Esto me ha llevado a parar un proyecto para darle forma a uno nuevo con el que me identifique mejor.
Esta aventura es muy personal para ti, como has comentado, ¿qué ha significado para ti poder volcar tus vivencias en este proyecto?
Significa todo, porque es una liberación tremenda. Creo que todos los artistas buscan un poco eso, poder sentirse libres a la hora de componer. La Raíz era muy buen grupo, pero tenía un estilo muy definido y un concepto muy claro que tenía que respetar. Si quería hacer algo más íntimo, necesitaba sentirme liberado. Entonces ese sentimiento ha sido muy satisfactorio, porque era una de las cosas que me hacían falta.
Donde nace el infarto es el primer trabajo de Ciudad Jara, ¿qué vamos a descubrir en él?
Una mezcla de estilos, unas letras muy cuidadas, con mucha poesía. Creo que es un disco para escuchar cuatro o cinco veces para poder profundizar en él, ya te digo, tiene mucha densidad de letra. En cuanto al estilo musical, hay de todo. Toco un poquito el rock, hay canciones más íntimas, hay baladas, hay unas nanas, una murga uruguaya… Hay de todo.
Este álbum se ha ido creado a lo largo de un año, ¿cómo ha sido el proceso?
Ha sido muy, muy delicado, muy denso, muy exigente, muy sugerido también, por muchísimos motivos. Era arrancar un proyecto desde cero en solitario, pero era lo que me pedía el cuerpo, y me rodeé de muchísima gente para poder trabajar bien. Contar con un equipo tan grande como Ciudad Jara, que somos un equipo enorme, es muy exigente y difícil, y al final está dando sus frutos, incluso antes de que salga el disco. Para mí ha sido genial, por lo menos en la parte artística que dependía absolutamente de mí, y me ha dado mucha tranquilidad.
Ha sido grabado en los estudios de Casa Murada (Tarragona), bajo la producción de Santos&Fluren y Tato James, ¿qué han aportado a tu trabajo? ¿qué has aprendido de todo ese periodo?
Tato es amigo, forma parte de la banda, es el guitarrista. Fue la primera persona con la que hablé hace mucho tiempo, incluso estando en La Raíz, para decirle que mi siguiente trabajo sería algo más personal, y que quería contar con él. Es un guitarrista buenisimo, que ha estado con los mejores de España, como Nacho Cano, Rosana, Manuel Carrasco… Pero tengo la suerte de que es amigo mío de aquí, del pueblo, y se ha querido unir a esto. Creándolo con él, con una persona tan buena, han salido cosas muy bonitas. Luego en Casa Murada, en Tarragona, los productores han sido Santos&Fluren, que son muy buenos, son de Barcelona, y han sacado un sonido maravilloso.
Has comentado en redes sociales que el disco está lleno de historias, y de canciones con estilo y vida propia, ¿encuentras la inspiración en lo cotidiano, en los pequeños detalles?
Sí, en todo. En lo cotidiano a nivel personal, en la familia, en lo colectivo, en las emociones, que me pueden dar salir con los amigos, beber una botella de vino, en tener una hija… En un montón de cosas he encontrado inspiración.
‘La canción del pensador’, ‘Siglos de golpes’ y ‘Bailé’ han sido los temas de adelanto para conocer este disco, ¿por qué elegiste estos?
Sobre todo, con ‘La canción del pensador’, que es la más íntima, quería arriesgar para que la gente también empatizara con este cambio de estilo. Y demostrar que he arriesgado por algo y que no tenía miedo de cambiar, por eso la lancé la primera. Con un poco de nervio, pero me la jugué. Fue un riesgo muy bonito de asumir que soy otra persona ahora mismo artísticamente. Me apetece hablar de muchas cosas a nivel social, pero también de mí, y en esa canción hablo de todo eso.
El diseño del álbum es muy bonito y vistoso. A día de hoy cuando el streaming está acaparando nuestra forma de consumir música, es importante darle plus para que sea más atractivo adquirirlo en físico, ¿estás de acuerdo con esto?
Los discos ahora no se venden mucho, el streaming está ganando ahora mismo, pero nosotros somos más ‘clasicotes’. No somos tan jóvenes y venimos de una tradición de tener el disco en físico, y queríamos hacer un formato chulo. A todos los artistas les siguen gustando tener su disco y que esté bien chulo.
El 19 y 20 de marzo en la Joy Eslava de Madrid tenéis la presentación de Donde nace el infarto. Conciertos para los que las entradas están agotadas desde diciembre, ¿qué se te viene a la cabeza al ver esta confianza del público aun sin conocer el disco?
Obviamente. Las entradas se han agotado con tan solo tres canciones, y te da mucha motivación. La verdad es que también me sorprende mucho, porque nunca esperas que sea tan rápido, pero sí que te sientes orgulloso de que has hecho un buen trabajo. No solo con esa tres canciones, sino que hemos cuidado todo al detalle, las redes sociales, como hemos hecho esta primera conexión con el público, como hemos nacido como Ciudad Jara… Todo eso lo hemos trabajado muchísimo a nivel de logística con muchos meses de antelación para que diera un buen fruto. Y es lo que ha pasado.
Fotografía de portada de Ana Máñez.