Jenny and The Mexicats es una banda multiglobal, ya que entre sus componentes se encuentran dos mexicanos, una inglesa y un español. Ellos son Jenny Ball (escritora, voz, guitarra y trompeta), Pantera (compositor y guitarra) Icho (contrabajo) y David (compositor, cajón y percusiones), y viven un momento profesional inmejorable. El grupo está en plena presentación de su último álbum, Mar abierto, publicado en febrero de 2017; y el 24 de septiembre, en Prat de Llobregat, dio comienzo su esperada gira por España, en la que visitará otras ciudades como Valencia, Granada, Murcia o Vigo.
Jenny and The Mexicats está ahora mismo en su mejor momento, ¿pero cómo nace la idea de crear este proyecto?
Empezamos hace nueve años en un tablao flamenco. Estábamos los dos mexicanos trabajando allí, y Jenny, que estaba con la orquesta, llegó a ver el espectáculo. Se cortó el pie con los zapatos que llevaba y tuve que darle una tirita. La casualidad que éramos músicos.
Sois de tres nacionalidades distintas: mexicanos, españoles e ingleses. ¿Cómo lo hacéis a la hora de componer o girar?
Es muy fácil. Nos juntamos y lo que salga. Componemos muy fácil porque cada uno pone su parte, su matiz, y todo fluye. Cada persona aporta algo.
Hemos podido ver que en septiembre habéis estado haciendo una gira por Alemania. ¿Cómo ha sido esta experiencia?
Muy buena. Ha sido muy curioso porque pensábamos que irían más españoles o mexicanos, pero casi el 100% eran alemanes. Era gracioso, porque estamos acostumbrados a lidiar con público que o habla inglés, o habla español, entonces nos dirigíamos a ellos y era como ‘¿inglés? No. ¿Español? Nooo’. Era complejo comunicarse con un público que no te entendía, pero que sin embargo cantaba todas las canciones (sin estar en ninguno de los dos idiomas). Fue muy raro, pero muy gratificante. Ha funcionado muy bien con los alemanes.
Eso dice mucho de la universalidad de vuestra música, que lleguéis a un público que ni siquiera os entiende.
Sí. Antes veníamos de Bolivia y también fue una experiencia rarísima. Hicimos cuatro estadios, que normalmente nosotros hacemos un estadio al año, en México, como mucho. Y se agotaron las entradas, la gente hacía cola para entrar…fueron miles de personas. Fue muy satisfactorio.
¿Cómo planteáis la gira por España?
Tenemos muchas ganas de empezar. Llevamos mucho tiempo fuera, pero nos consideramos una banda española, en concreto madrileña, porque empezamos aquí, en salas de 20-30 personas. Y es una alegría el cambio de estar en salas con cientos de personas. El público de España nos quiere mucho. Es bonito tocar en México, con tu familia, tus amigos…pero te emociona más el llegar a Madrid y ver que tienes sold out.
Se podría decir que la banda está aterrizando con más fuerza ahora en España. ¿Qué patrón habéis utilizado para elegir las ciudades escogidas?
Nos hemos apoyado en Spotify. Tiene una herramienta que te dice quién te está escuchando, dónde, cuándo…y te va indicando qué nivel de fan tienes en cada ciudad. Madrid, Granada, Córdoba y Valencia son de nuestras ciudades más fuertes. Entonces intentamos sobre todo ir a esas ciudades. Así averiguamos que en Bolivia llevamos 4 sencillos en número 1 y nunca hemos pisado ese país. Al preguntar nos dijeron que sí, que sonábamos mucho. Y allí no hemos hecho ni promos, así que nos dimos cuenta de que a veces es más fuerte el boca-oreja que el mismo Internet o la televisión.
Ya que lo comentas, ¿qué importancia les dais a las redes sociales?
Es lo que más nos ha ayudado en estos años. Nosotros somos muy viejos y empezamos con el mySpace, y luego pasó a Facebook, Twitter…, incluyendo nuestros perfiles personales. Se nos acercaban marcas, ya no sólo como Jenny and the Mexicats, sino como personas individuales. Vas viendo que un proyecto, sea de la índole que sea, puede llegar a mucha gente. Hay muchas marcas que nos apoyan, y eso es brutal y necesario.
¿Cómo fue la producción de ‘Mar abierto’?
Ha sido muy raro. Hemos estado de gira casi todo el tiempo, no tuvimos tiempo de nada. Muchas veces era sacar la guitarra en un avión y decir ‘empieza a grabar esta improvisación’. Ha sido un proceso largo desde que terminó todo lo que conllevó el segundo disco. Y para entonces ya teníamos casi todo el tercer disco grabado. La grabación fue lo fácil, porque en una semana lo teníamos todo, lo complicado fue la composición. Para cuando nos dimos cuenta, estábamos en Inglaterra y el disco ya se había publicado en México. Y dijimos, ‘¿por qué no empezar a presentarlo ya?’
Es bastante duro el ritmo de vida que lleváis, por lo que me cuentas.
Es un poco incómodo, nada más que terminamos una gira, nos metimos con la otra. Hace un rato estábamos riéndonos, porque no sabíamos ni dónde estábamos. Yo hace más o menos un año que no sé lo que es un lunes, un martes… no tengo esa concepción del tiempo. Los horarios, ni te cuento. Me duermo cuando tengo sueño, punto. Si intentas tener un horario, no eres persona: malcomes, duermes cuando puedes… y cuando me acostumbro a un horario, justo hay que cambiar de país, con un horario totalmente distinto. Lo bueno es comer y dormir cuando te apetezca, si no te vuelves loco. Nos conocemos todas las gasolineras del mundo. También es cansado. En una entrevista previa nos preguntaron por qué era tan melancólico este disco, por qué hacíamos tanta alusión a los cambios de vida, a las despedidas… y es precisamente por esto. Es muy bonito lo que hacemos, no todo el mundo puede hacerlo, y lo valoramos un montón. Los conciertos son brutales. Temas como ‘La primera despedida’, habla un poco de eso, de la primera vez que dejas a tus amigos, a tu familia… hace casi 7 años que nos fuimos de Madrid y yo vengo en cada hueco que tengo a ver a mi familia.
Vuestro estilo mezcla jazz, rockabilly, folk, flamenco, reggae… ¿de dónde nace todo eso?
Se explica por las diferentes disciplinas que dominamos cada uno. Jenny viene de la música clásica; yo estudié flamenco; David es más de ritmos cubanos; e Icho es más de jazz. De entrada, los idiomas musicales son totalmente distintos. Y las influencias, ni te digo. No sabes lo que es ir en una furgoneta con nosotros, a cada momento vamos pasando la canción. Ninguno tenemos gustos comunes.
¿Qué planes tenéis para la etapa que os queda?
En España estamos retomando territorios, quiero más que nadie (porque está aquí mi familia) retomarlo. Esperamos realmente que podamos quedarnos en España como segundo cuartel. Que salgamos de aquí hacia toda Europa. Y que el disco siga para adelante con la fuerza con la que lo está haciendo.