Para Sidecars, actuar en Sevilla siempre ha sido sinónimo de puerta grande, de éxito. En su penúltima noche de gira, lo volvió a conseguir. La pasada noche del 3 de abril no agotaron en el Cartuja Center, y aun así, no hizo falta. Como bien matizó Juancho, vocalista de la banda, “muchas veces 500 personas hacen más ruido que 2000, y esta vez nos lo habéis demostrado”. Y esto fue gracias tanto al público como a la humildad y al talento que caracterizan a la banda, que vino para dejarnos asombrados.

Según la propia banda, aún le queda camino y no lo tiene todo ganado. Pese a esta afirmación, podemos decir que el grupo está en el cenit de su carrera. Sevilla ha disfrutado de los directos de Sidecars en los últimos años casi en todas sus vertientes, si no en todas. A la banda le encanta la capital sevillana y ha venido en acústico, en eléctrico, en trío acústico y en festival (creo que podemos afirmar que en todas sus giras recientes, nos ha visitado). La última, en teatro. Y sinceramente, es la mejor de todas. Suena compacta, tiene un sonido contundente y sobre todo, suena de maravilla. Podríamos decir que es su mejor hábitat. En teatro se escuchan mejor todos los instrumentos, los arreglos más secundarios y la voz de Juancho por encima de todo esto. Con ningún tipo de puesta en escena salvo la iluminación y alguna alfombra, pudimos disfrutar del sonido más puro de la banda. Sonó tan bien y disfrutamos tanto, que el tiempo voló y cuando quisimos darnos cuenta, ya estábamos pidiendo los bises. La intimidad del evento se vio sorprendida por la participación activa de los asistentes.

Respecto a la afirmación que comentaba en las primeras líneas, el público de anoche se volcó con la banda. El amor que se profesan es recíproco, tanto por los sold outs que le preceden como con el cariño que se tratan en los directos. Niños, padres, abuelos… tenemos suerte de contar con bandas nacionales que son capaces de pasar de generación en generación. Con la segunda canción, ‘La tormenta’, los asistentes ya se pusieron en pie casi de forma instantánea con los primeros acordes. Y así, casi la mayoría del concierto, sobre todo en la ‘traca’ final con ‘Contra las cuerdas’, ‘Fan de ti’ y ‘Amasijo de huesos’.

Sidecars no es la sombra de nadie; ha creado su propio mundo, su propia música, y anoche hizo un show de rock en un teatro, y no todo el mundo puede decir lo mismo. De nuevo, gracias también a Cartuja Center y a Purple Moon por apostar por nuestra música y darle un espacio a nuestra cultura.
Fotografía de portada de Patricia del Zapatero.