La autora japonesa Mayumi Inaba publicó en 1999 esta conmovedora historia, en la que nos cuenta cómo fue su vida junto a su gata Mi. El pasado año, gracias a la editorial Quaterni, especializada en literatura oriental, Veinte años con mi gata llegó a nuestro país. Este relato te llegará al corazón, sobre todo si compartes (o has compartido) tu vida con un minino.
El destino quiso, que una noche de vuelta a casa, la autora se encontrara con una pequeña gatita en su camino. Una “bolita de pelo”, como ella la describe, que se encontraba sola y en peligro. Ella no se lo pensó dos veces, y rescató a la que se convertiría en su compañera de vida durante 20 años. Mayumi Inaba nunca pensó que Mi pudiera cambiar su vida, algo que nos ha pasado a todos los primerizos en el universo gatuno. Como era de esperar puso su vida patas arriba, condicionó su día a día por los cuidados que necesitan estos animales, pero sobre todo le descubrió una manera de amar y ser amado desconocida para ella hasta el momento.

La autora nos hace partícipes de la vida de Mi desde que la rescató hasta que tras dos décadas conviviendo juntas, la gata siguió el desenlace natural de cualquier ser vivo. Nos habla del estado en el que estaba cuando la llevó a su nuevo hogar, llena de pulgas y hambrienta, cómo fueron los primeros días, cómo fue creciendo, las cosas que comía, cuáles eran sus rutinas, dónde iba a pasear, cómo se relacionaba con su entorno, y aunque sea natural, pero no deja de ser triste, cómo fue debilitándose a medida que iba siendo más mayor.
Veinte años con mi gata es un relato con el que muchos nos podemos ver reflejados, al igual que a nuestros pequeños peludos, miembros de pleno derecho de nuestras familias. Afable y adorable, pero también real y duro ante el implacable paso del tiempo, no apto para corazones sensibles. Al final lo que nos queda es el recuerdo del amor y el cariño que nos dan o que nos han dado.
Mi, al igual que otros personajes gatunos, reales o ficticios como Mia, Bob o Alfie, se ha ganado ya un lugar en nuestro corazón.