Raquel Tello, periodista de formación, decidió hace un año dar rienda suelta a su pasión por la escritura y la literatura, creando un blog propio, un lugar común en el que las mujeres pudieran sentirse comprendidas y protagonistas a través de sus relatos semanales. Dado el éxito que ha alcanzando con estas historias, este verano ha publicado su primera novela de edición propia, Las Mujeres, los 40 y algo +, en la que recopila las vidas de los diferentes personajes nacidos de su universo creativo. Nos hemos citado con ella en la sevillana librería Caótica, donde el pasado septiembre presentó dicho trabajo, para que nos hable sobre él y sus inquietudes literarias.
Estudiaste periodismo, pero decidiste no ejercerlo, ¿qué te llevó a dedicar tu vida profesional por otros caminos?
No tenía la vocación necesaria que la profesión demandaba. Una profesión muy ingrata, muy desagradecida… y hay que tener mucha vocación para que te merezca la pena. Antes de hacer ningún tipo de trabajo profesional, únicamente con las prácticas que se hacen durante la carrera, yo ya sabía que no me quería dedicar a eso. Y he enfocado mi carrera en otros aspectos de la empresa privada, en departamentos de compra y venta. Actualmente trabajo en una empresa hortofrutícola en Almonte. Exportamos fresas, frambuesas, arándanos… al norte de Europa. Vamos, nada que ver. Aunque la vocación de escribir sí está, supongo que es por lo que una estudia periodismo, porque tienes esa ilusión y motivación que implica el dedicarle un ratito y poder sacar cuatro líneas y poder contar lo que tienes en la cabeza.
En uno de los apartados de tu web, en el que te presentas al público, dices «Leer es algo que se hace a solas y en silencio, porque dentro de cada libro hay magia«, ¿qué importancia tiene para ti un libro?
Sólo la persona que ama la literatura puede entender qué significa abrir un libro, y sumergirse en la historia de los personajes. Para mí, leer es viajar. Es verte en un universo que sólo está al alcance de tu mano. Ese momento en el que da igual que el mundo se esté cayendo, que tú estás deseando llegar de trabajar, y abrir esas páginas. Pero no sólo el momento de empezar, sino también el de acabar esa historia y decir «¿y, ahora, yo qué hago?». Estoy encantada de terminarlo, pero a la misma vez es un desasosiego decir, «ya tengo que abandonar estos personajes«. ¿Qué pasa? A mí me gusta el libro físico por eso, lo cierro y lo pongo en mi estantería, y ya sé que estará ahí. Y como tengo mala memoria, puedo releerlo, y disfrutar como la primera vez que lo leí. Para mí, leer es parte de mi vida. Siempre he estado en el otro lado. Mi sueño es tener una librería con libros del techo al suelo. Es la oportunidad de compartir, de vivir otras vidas. Es mágico.
Además narras como una especie de ceremonia, con la que me siento un poco identificada, a la hora de enfrentarte a una lectura nueva, así como con mucho amor. Hay cosas que las nuevas tecnologías no pueden superar, ¿no?
Justamente las ventajas que puede encontrar el que te vende el libro electrónico, y no le falta razón, es que te vas de viaje y te llevas un aparatito que no pesa nada, y puedes llevar todos los libros que quieras. Pero eso para mí no es una ventaja, porque yo quiero mi libro en papel. Se pierde la magia de que estés leyendo y te vea la tapa, con un e-book puedes estar leyendo el periódico. También se pierde ese ritual de cuando te vas a empezar un libro y hueles el papel nuevo, o tomas notas, cuando lo vuelvo a releer con el tiempo veo esas reflexiones que puse en su día, y a lo mejor no se corresponde con lo que pienso hoy. Es parte de esa ceremonia de la que hablas que te une a la literatura, y que el libro electrónico no te da. Todavía me resisto a él. Este verano me fui de vacaciones con un libraco de mil páginas, que me decían que dónde iba con eso (risas), pero a mí me gusta. Me da igual que se ensucie, que se moje… al final y al cabo son vivencias.
Hace un año creaste un blog donde escribes relatos por entregas semanales, ¿Cómo decidiste dar el paso de ser mera lectora a ser tú quien escriba esas historias?
En esto empecé hace un año. Comencé enviándoles a mis amigas cositas, relatos cortos que había escrito, por e-mail. Hasta que una de ellas me dijo que me creara un blog, porque lo de los correos era un poco lioso, porque algunos no llegaban, otros se perdían al cabo del tiempo o se olvidaban. Y me dio esta idea de un sitio donde poder colgar yo misma mis relatos. Al principio no me gustaba mucho la idea, pero ha tenido mucho éxito. Lo abrí en septiembre del año pasado, y si me llegan a decir entonces lo que yo he llegado a hacer en un año, no me lo hubiera creído, sinceramente.
Esas distintas entregas son las que han originado la reciente publicación de tu libro Las Mujeres, los 40 y algo +…
Apareció esta idea, sabía que quería hablar de un tema determinado y de lo que surgiera, y empecé a colgar relatos semanales, y vi que la gente se iba enganchando. Voy teniendo cada vez más lectoras y más seguidoras, que se sienten identificadas con los personajes. Creo cuatro personajes, y pongo de protagonista a una mujer que está viviendo una situación de separación sentimental. Y regresa a un entorno en el que las reglas del juego han cambiado, donde las mujeres seguimos complicándonos la vida, le damos mil vueltas a la cabeza sobre algo… Las lectoras se identifican y quieren saber más, y es como un folletín. Cada semana va contándote algo, y te lo dejo ahí para que la semana que viene estés pendiente. Y son las propias lectoras las que me piden que lo saque en papel. Algunas se habían perdido, otras no están acostumbradas a leer en el móvil, otras habían dejado de leer un relato… Y ellas mismas son las que me piden un libro. Se me ocurrió que el último capítulo de la temporada, porque en verano quería parar para otros proyectos que tenía en mente, lo publicara sólo en la novela en papel. Ahora cuando empiece la segunda temporada, que esto va a dar para muchas, ¡espero! (risas), colgaré el último capítulo, y volveremos al otro formato. Y si todo va bien, el próximo verano volveremos a tener libro.
¿Por qué te has decantado por hablar sobre el universo femenino y no por otra temática?
Porque tenía claro de lo que quería hablar, de mujeres de a partir de los 40 años, cuando ya las decisiones de tu vida están tomadas. Has estudiado tu carrera, has elegido la profesión que quieres, has elegido a tu pareja, has tenido niños o no… y ahora llega un punto en el que ya no hay nada más que elegir. Sólo queda disfrutar de todo eso que has conseguido. Y luego reflexionas y piensas: «¿Esto era lo que yo quería? ¿Para esto me he sacrificado tanto?«, y ahí comienzan las dudas. Esto está en muchísimas de las mujeres de esta edad. Supongo que de los hombres también, aunque yo sólo hablo de las mujeres.
Además de en tu blog, también escribes para otros como colaboradora, creando relatos exclusivos para Aire-soloparamujeres y Asuntos de Mujeres.
Sí, aparte de mi blog donde tengo esta serie de Las Mujeres, los 40 y algo +, se me ocurrió ponerme en contacto con revistas digitales, que tuvieran contenido femenino. Mi objetivo es llegar a esas mujeres que no leen. Las que leen están ahí y son más accesibles. Porque pienso que hay un sector de la población femenina que me da mucha pena que no esté vinculado con la literatura simplemente porque no leen. Obviamente no puedes crear un vínculo con algo que no haces, pero ¿cómo alguien no se puede meter en un libro?, ¿cómo alguien no se puede enamorar de esos rituales?. Entonces para mí era como un reto, y cómo lo podía conseguir, pues hablando de temas que a ellas les pareciesen atractivos. Hay seguidoras que me han comentado que el último libro que se leyeron fue en el instituto, y el mío se lo habían «bebido» en un día. ¡Es un subidón! De pensar que estoy llegando a donde quería. Porque hablo de este mundo que compartimos las mujeres, reflexiono sobre diversas cuestiones, y por ello me han llegado a decir que se sienten identificadas. Y hablé con estas revistas web, para poder escribir unos relatos cortos que nada tienen que ver con los otros míos. Lo que hago es crear una pequeña historia, en relación con el público que lee esa revista. Y normalmente en 20 o 25 capítulos, también semanales, creando la necesidad de seguir leyendo lo que pasa a continuación. En estos relatos siempre me enfoco un poco a las relaciones sentimentales, porque creo que es donde enganchan con el público al que quiero llegar, y a través de esto introducir otros temas interesantes de tratar.
¿Cómo es compaginar tu trabajo con tu pasión por la escritura, manteniendo el ritmo de texto por semana…?
La escritura es una habilidad que cuanto más practiques, más soltura coges. Las primeras veces que me puse a escribir, cuando abrí el blog el año pasado, para escribir un capítulo de unas 700 palabras que es lo que vengo haciendo, antes me podía llevar tres o cuatro días, hasta que veía que más o menos me quedaba bien. Ahora me siento, y sale solo, tengo que pulir menos cosas. Pero no es fácil. Yo trabajo ocho horas fuera de casa, además trabajo a 60 km de distancia, tengo dos niños pequeños, estoy separada… Escribir no es algo que puedas compaginar con varias cosas a la vez, tengo que estar concentrada, con silencio, necesito una continuidad, necesito al menos un par de horas seguidas. Tienes que robarle horas de sueño, y cuando estás cansada tampoco puedes escribir. Es una actividad poco compatible. Lo que hago es aprovechar los fines de semana que estoy sola, para escribir cinco o seis relatos. Pero ha habido un momento que se me han juntado el libro, las colaboraciones, el final de curso… y necesitaba que llegara el verano para parar un poco y descansar. Quería dedicarme a otras cosas, tengo otra novela en fase de revisión, y no he podido. Pero muy feliz, porque el libro ha tenido muy buena acogida, de 200 ejemplares que se han publicado por autoedición, y en un mes han quedado 50.
Me imagino que a tus hijos les transmitirás este amor por la lectura y la escritura. ¿Cómo lo perciben ellos?
En mi casa hay muchísimos libros como te puedes imaginar, soy lectora desde pequeña. Y cuando tienes hijos siempre estás intentando comprarles libros para niños. Actualmente tenemos una competencia feroz que son las tecnologías, han nacido en ese ambiente. Pero me he dado cuenta que, aunque queramos inculcarles a nuestros hijos el amor por la literatura, es algo que no se debe formar, te tiene que nacer. Si intentas hacer que obligatoriamente le guste un libro, a lo mejor, hasta lo aborrece. Tienes que ser capaz de detectar cómo enganchar a tu hijo con algo que sólo está en los libros. Mi hijo el mayor, que tiene ocho años, se ha leído toda la serie del Diario de Greg, tiene muchas ilustraciones, viñetas, bocadillos… Son 11 libros de unas 200 páginas cada uno, y es una satisfacción que haya sido capaz de engancharse a algo así. Aún es muy pequeño todavía, y dice que no quiere leer más, y yo lo llevo a librerías, a cuentacuentos, si cojo un libro, él coge otro… Hay que meterlo con cositas culturales, que tenga esa sensibilidad, que luego le permita meterse en una historia, y disfrutar con ella.
¿Dónde se puede adquirir tu libro Las Mujeres, los 40 y algo + ?
Se puede adquirir actualmente en mi blog, en el apartado «En papel», en Amazon, en la web de la editorial (Uno Editorial) y en librería Caótica. Tendremos que pedir una nueva edición, porque están quedando pocos ejemplares.
Justamente, el jueves 14 de septiembre, presentaste en Caótica este trabajo, ¿cómo fue la acogida del público?
Fantástica, una cogida maravillosa. Estaba esto lleno a reventar (librería Caótica). Me sentí muy arropada por muchas mujeres, sentía que pedían empatía, que se identificaban con lo que estaba hablando. El periodista que me presentó, Jesús Vigorra, es amigo mío de hace muchísimo tiempo, entonces hicimos una especie de tertulia. Un día inolvidable, muy bonito como escritora novel. Estoy muy agradecida.
3 comentarios
Gracias Patricia, por esta fantástica entrevista. Pasamos un rato agradable conversando. Un placer.
Me encanta Raquel y todo lo que escribe….llegaras muy lejos
Me encantó la entrevista. Felicidades por lo que conseguistes! Chica, eso de que quedan pocos ejemplares? Espero que quede para mi! Jajaja