Paco Ortiz: “Aníbal. El arquitecto de Sevilla ha venido para quedarse y recordar su obra y su figura”
El cineasta nos habla sobre su nuevo documental
“Sevilla es la que es porque tú habitaste en ella”. Si la relación del arquitecto Aníbal González con su ciudad natal fue una historia de amor y admiración, qué mejor manera que definirlo a él como el Arquitecto de Sevilla, según reza el título del documental que Paco Ortiz ha dirigido y guionizado con la producción de José Carlos de Isla. Quien pronuncia las palabras anteriores es Aníbal González Serrano, “orgulloso nieto de Aníbal González Álvarez-Ossorio”, que en una emotiva carta póstuma se dirige a la persona de la que lleva su sangre y supo hacer realidad una utopía propia de obras clásicas. Anibal González. El arquitecto de Sevilla es de esos trabajos que te reconcilian con la historia y el ser humano.
Después de tus anteriores trabajos en películas documentales como Algo salvaje. La historia de Bambino, ¿por qué en esta ocasión has elegido a Aníbal González?
Primero es cómo me llega a mí la posibilidad. Y es porque dando un paseo por el Parque de María Luisa, cuando veo la estatua que allí le tienen levantada me paro a pensar que se trata del autor de algo que he visto muchas veces, como es la Plaza de España de Sevilla. Es algo que no nos paramos a pensar, porque es verdad que conocemos a los autores de libros pero no a los que han hecho las obras arquitectónicas que nos rodean. Y hablamos de algo muy importante para una ciudad. Está en nuestro día a día. Si la arquitectura es bonita y el sitio que nos rodea es bello, nuestra vida es más agradable. Y, ¿por qué no iban a ser protagonistas estas construcciones y sus creadores? La literatura nos levanta el espíritu y el alma, pero la arquitectura es la responsable de que durmamos bajo un techo, podamos hacer trayectos agradables a la vista… ¿Por qué no? Decido investigar a Aníbal González y descubro que hay una vida emocionante; hay muchos datos en su biografía que me llaman la atención, tanto como como si se tratara de un guión cinematográfico. Y ahí surge este proyecto sobre la vida de Aníbal González.
Después de investigar en la vida de Aníbal González, ¿crees que se le ha dado en la historia el sitio merecido? Como dices, la Plaza de España está ahí, pero pocas veces valoramos el esfuerzo que ha debido de suponer crear algo tan colosal y ponerle cara y nombre a quien lo ha hecho.
Es contradictorio. Pasa una época en que sí es reconocida su figura. Su entierro es el segundo más multitudinario después del de Joselito el Gallo. El dato está ahí. Y es muy importante. Pero después pasa a un olvido, y ahí está la frase que ha sonado muchas veces: “En España enterramos muy bien pero olvidamos mejor”. Y ocurre eso. Aníbal González pasa de tener un notable éxito y un gran reconocimiento a desaparecer. Y es casi sepultado por las modas. Pero es paradójico que Sevilla le diera la espalda y no lo considerara hasta hace poco como el arquitecto responsable de su imagen actual, que sigue siendo vigente desde hace tantos años. La ciudad que vienen a ver los turistas es la Sevilla de Aníbal González y sus pabellones. Me parece que ahora sí se le está haciendo la justicia que merece. También se acerca el centenario de la Exposición del 29; eso tendrá que ver algo. Se le ha erigido un busto, hay un proyecto de un museo… y esta película, Aníbal. El arquitecto de Sevilla. No está impulsada por ninguna de estas circunstancias, pero ha venido para quedarse y recordar su obra y su figura.
Fotografía de Patandi
Viendo la obra de Aníbal González se tiene la idea de que poseía una mente privilegiada. Hacer lo que hizo, y no solo la Plaza de España de Sevilla, no está al alcance de cualquiera. Y en la película lo has expresado estupendamente. ¿Te ha atrapado el Aníbal personaje?
Hay dos cuestiones. Era un magnífico dibujante y antes de sus estudios universitarios ya dibujaba para Torcuato Luca de Tena, que era su primo, en las revistas que llevaba. Y la otra cuestión es que fue el número uno de su promoción de Arquitectura. Eso dice mucho a su favor en cuanto a que debía de tener un talento importante. Y aunque en aquella época los contactos hacían mucho, tuvo que poseer una personalidad destacable. Tanto es así que para afrontar las obras como la Plaza de España, que se tardó casi 15 años en construir, que es algo faraónico, con un diseño anacrónico, fuera del tiempo, del espacio, de las modas, etc., hay que tener un carácter muy destacable. No solo creó espacios como los que conocemos, sino que transformó una ciudad. No es el urbanista que diseña las calles, pero transforma a Sevilla en cuanto a su exterior, sus fachadas. Su estilo resalta el aspecto de fuera, para que las casas parezcan más de lo que son. Y su estilo arquitectónico resalta la belleza. E involucra a otra gente que sigue su corriente del Regionalismo. Si se hubiera quedado solo únicamente estarían sus edificios. Pero hay muchos con su influencia.
Has dicho de Aníbal González algo así como que le escribió una carta de amor a Sevilla con sus obras…
A Sevilla se le han cantado muchas canciones y se le han escrito muchas cosas. Pero se le escribe porque es una ciudad bonita. Y por su arquitectura, su historia, su gente… Y en eso tiene mucho que ver Aníbal González. No le ha escrito como tal pero la ha esculpido. Y esa belleza que le ha concedido ha inspirado a otra gente. Fue un genio, un gran arquitecto, pero también estaba profundamente enamorado de la ciudad que le vio nacer. Nació en Sevilla y vivió en Sevilla. Y desarrolló gran parte de su obra aquí. Su amor por Sevilla fue más importante que su propio ego y supo respetarla al máximo. Y fue una figura muy apreciada y admirada en su época.
El amor de Aníbal González por Sevilla fue más importante que su propio ego y supo respetarla al máximo
Paco Ortiz
La Plaza de España es el gran emblema de la obra de Aníbal González en Sevilla. Pero paseando por otros lugares nos encontramos trabajos de gran calidad que no han trascendido tanto. ¿Por qué?
No sólo de Aníbal González. También de otros regionalistas. El hotel Alfonso XIII es de Espiau, que fue coetáneo de Aníbal. El edificio de la Adriática, que está frente al Ayuntamiento, en la avenida de la Constitución, también es de Espiau… Hay muchos edificios de Talavera. En el documental hablamos de ellos, y decimos quiénes son los arquitectos. No sólo hablamos de Aníbal, sino también de sus coetáneos. Y creo que deberíamos hablar de esa arquitectura de Aníbal González y de otros autores como en Barcelona, por ejemplo, se habla de Gaudí y de otros creadores que hacen una arquitectura modernista. El protagonista es el Modernismo, más allá de que quien destaque sea Gaudí. Porque hay otros autores. Y en Sevilla está el Regionalismo. Y el protagonista es Aníbal González. Lo que pasa es que aquí no sabemos aprovechar el filón. El Modernismo parece que tira a lo novedoso y el Regionalismo a lo pasado de moda, a lo antiguo… Pero al final también es bonito ver un templo griego o romano. Y nadie piensa que sean obras malas o fuera del tiempo.
En el documental mezclas ficción con realidad. Y das cabida a testimonios de especialistas. ¿Esta combinación es una manera de acercar a la gente más claramente hacia el contexto temporal y social en que vivió Aníbal?
Claro. Existe el hándicap de que hay poquísimos documentos gráficos de Aníbal. Si me apuras no llego a diez fotos. Y en algunas está acompañado de alguien. De retratos sólo hay tres. ¿Cómo voy a contar la vida de Aníbal sin que la gente imagine siquiera cómo era? Hay que ponerle cara. Hay muchos recursos. Desde dibujos animados a grafismos. Pero lo que me gusta es la ficción. Puede dar una imagen más fidedigna a lo que es recrear los momentos. Son distintos pasajes. No es toda su vida. Son pequeños esbozos que damos de la vida del arquitecto. Queríamos que se conociera a la persona. La ficción es referente a ella; no a su obra. Queríamos que se supiera quién estaba detrás del arquitecto. Hay mucha más información en internet de la que he dado. No me he dedicado a hablar sobre la cerámica, o dónde estaba el taller. Se trataba de presentar a la persona, lo que no se va a encontrar en casi ningún sitio; el aspecto humano. Esto hace que entendamos cómo desarrolla su arte. Y con Bambino intentamos hacer eso en su momento.
Fotografías de Patandi
¿Cómo fue el proceso de encontrar a Nacho Bravo, el actor que le ha puesto rostro a Aníbal González?
Como tenemos a una persona para casting, él ya sabía que había alguien que conocía a un actor que iba a dar con el perfil. Y nos dijo que no iba a hacer ningún proceso en ese sentido porque había un actor que es clavado a Aníbal. Y lo curioso fue descubrir que estudió Arquitectura (risas). Y nos lo dijo en el rodaje cuando le dijimos que tenía que repasar los planos que ya estaban dibujados. Y él sabía coger perfectamente el carboncillo, la goma, como buen arquitecto que es. No ejerce. Es actor. Pero ha hecho sus seis años de licenciatura. Ha salido muchas veces la broma de la preparación del personaje. Como Roberto de Niro cuando engorda 40 kilos, o Daniel Day Lewis que cosió zapatos durante un año para su personaje. Pues seis años de Arquitectura ha tenido Nacho para hacer de Aníbal. Lo clavó, porque físicamente se ve. De hecho, el póster es una foto de él, no de Aníbal González. Y la gente puede llegar a confundirlo.
Andalucía es una exportadora mundial de personajes de mucho relieve
Paco Ortiz
En relación con la banda sonora, compuesta por Pablo Cervantes, ¿qué más se puede decir de alguien como él?
Pues que es una apuesta segura. Y nos entendemos muy bien. Le pedí un leit motiv que fuera la Plaza de España, porque para mí es lo más importante, es el icono. Y es tan importante ese edificio que ya es suficiente para que no haya que hacer más ahínco. Quería ver la elaboración de la banda sonora en distintas fases. Va creciendo en instrumentos en función a como crecía la plaza misma en su construcción. Y ha hecho temas musicales que crean esa tensión, esa pausa, esas situaciones agradables o desagradables, y el trabajo que ha hecho es impecable. Incluso hay un momento como cuando estamos en la plaza de toros de Osuna, donde hace una variación que recuerda la cabecera de Juego de Tronos.
Para concluir me gustaría preguntarte por el momento actual por el que atraviesa la creación de documentales y películas documentales, gracias a los cuales estáis dando relevancia a personajes que no reciben esa importancia que merecen y los colocáis en su justo sitio. En tu caso, por ejemplo, con Bambino, y ahora con Aníbal González.
Para empezar, me parece que Andalucía es una exportadora mundial de personajes de mucho relieve. Y nosotros tenemos que ser quienes hablemos de ellos y de sus éxitos. Además, actualmente hay una generación muy importante de documentalistas andaluces que con buen tino y pulso cuentan historias de aquí que están obteniendo muchos reconocimientos incluso a nivel internacional. Tenemos talentos que no han sido valorados convenientemente, como Aníbal González. Mi próximo proyecto es sobre Antonio el Bailarín. Posiblemente, el más importante de la historia de España. Y es un perfecto desconocido para muchas generaciones. Es un proyecto conjunto con el de Marisol. Queremos destacar la figura de Pepa Flores. De Marisol se han contado muchas cosas porque su vida ha estado muy expuesta, pero de Pepa Flores se sabe menos. Y buscamos a la persona, sin entrar en el escándalo o el cotilleo. Vivimos en una época en la que priman estas cosas. Nosotros huimos de todo eso.