«Prometeo robó el fuego a los dioses y se lo dio al hombre. Por ello, fue encadenado a una roca y torturado por la eternidad«.
Cuando el físico estadounidense Robert Oppenheimer concluyó con éxito la supervisión de la prueba Trinity y confirmó la posibilidad de la fabricación de la primera arma nuclear, comenzó una nueva etapa en la historia de la humanidad. Había nacido la Era Atómica. En plena Segunda Guerra Mundial, y con la amenaza inminente del avance imparable del ejército nazi, Julius Robert Oppenheimer lideró el Proyecto Manhattan, ensayos nucleares que dieron origen a la bomba atómica. Estados Unidos, una vez más, se anticipó a los demás países. Una millonaria inversión económica del gigante presidido entonces por Harry S. Truman (más le hubiera valido invertir en salvar vidas antes que en aniquilarlas) llevó al mundo a vivir uno de sus peores capítulos, el bombardeo indiscriminado sobre las ciudades japonesas de Hiroshima y Nagasaki, que supuso el final de la gran contienda bélica, pero a la vez el de la vida de miles de personas. Aquel indudable éxito de la investigación subió al máximo nivel al reconocido físico norteamericano. Pero también originó después en él un enorme sentimiento de culpabilidad por los efectos negativos de su creación. Un gran dilema moral sacudió a Oppenheimer. Hasta tal punto fue así que se erigió posteriormente en un firme opositor del uso de las armas nucleares.
Y aquí es donde entra uno de los grandes realizadores de la actualidad, Christopher Nolan. Con el sencillo pero elocuente título Oppenheimer, el director londinense, padre de obras cinematográficas como Dunkerque, Insomnia, Batman Begins, The Dark Knight o Interstellar, nos vuelve a regalar una película para los anales. Porque su último trabajo en la dirección (y como guionista, pues suyo es el guión adaptado del libro biográfico de Kai Bird y Martin J. Sherwin, titulado American Prometheus: The Triumph and Tragedy of J. Robert Oppenheimer, ganador del Premio Pulitzer), sin duda, va a pasar, ya está pasando, a la nómina de las obras más excelsas del cine. En pocos días, ha reventado la taquilla; en unas fechas consideradas habitualmente como inhábiles para la proyección de valiosas películas.
Un reparto a la altura
Si su impecable interpretación de Tommy Shelby en la aplaudida serie de televisión Peaky Blinders no le había dado ya un lugar estelar, Oppenheimer puede suponer la confirmación, tras una larga trayectoria, del irlandés Cillian Murphy, quien encarna en la película a Julius Robert Oppenheimer. Un duro proceso de preparación del personaje ha dado un excelente resultado que la crítica especializada no ha dudado en resaltar. Como también es destacable la aparición estelar en la película del ya veterano Robert Downey Jr., como el polémico Lewis Strauss, integrante de la Comisión de Energía Atómica de los Estados Unidos, pieza clave en el desarrollo de la historia.
Pero ocurre que el reparto en general ofrece una gama importante de intérpretes, reencontrándonos con Matt Damon (como el general Leslie Groves), Josh Hartnett (Ernest Lawrence), Kenneth Branagh (como el científico Niels Bohr) o Matthew Modine (como Vannevar Bush). Aparte dejamos al australiano Jason Clarke, como Roger Robb, con un papel decisivo en la partidista audición de seguridad llevada a cabo a Oppenheimer con el fin de desacreditarlo, o el siempre efectivo Gary Oldman como Harry S. Truman, el 33º presidente de los Estados Unidos. Pequeña pero intensa aportación al filme. Emily Blunt, tan eficaz como siempre, en la piel de Katherine Kitty Oppenheimer, y Florence Pugh, otra confirmación, como Jean Tatlock, afiliada al Partido Comunista de EE.UU., esposa y amante, respectivamente, del físico, son figuras inseparables de la película.
Tensión, vértigo, electricidad… una bomba de película
Quizás en algunos momentos, Oppenheimer se vuelva algo densa por la temática relacionada, la física, y los términos que generan las tareas de investigación y valoración de la propuesta formulada por el gobierno de los Estados Unidos, pero ahí se ve la mano diestra de Christopher Nolan. El ritmo vertiginoso en muchas ocasiones, la capacidad de mantener la tensión, la impecable combinación que hace de la música con los diálogos o las escenas, la genial dirección de los actores (algo menor en el caso de las actrices a pesar de la gran interpretación que Emily Blunt hace de esposa de Oppenheimer, cuyo protagonismo aumenta conforme avanza la trama), y el sonido y la brillantez de una fotografía impactante hacen de la película una plausible obra. Rodada en formato IMAX, y aunque las salas de cine aún no están preparadas para este reto, se agradece la gran mejora que ofrece esta técnica.
Oppenheimer se desarrolla combinando el pasado y el presente de una manera alternativa, saltando entre los inicios del físico en el Laboratorio Cavendish de Cambridge, su estancia en Los Alamos, Nuevo México, en la fase final del proyecto, su polémica audiencia de seguridad en 1954 o la sorprendente audiencia de confirmación de Lewis Strauss en 1959. A lo largo de ese constante ir y venir, vamos viendo la evolución de un Oppenheimer que pasa de la ilusión por la gran oportunidad que recibe a la euforia del éxito alcanzado, con su crisis moral que le aboca a su decadencia personal y a granjearse la enemitad del gobierno estadounidense por su oposición posterior a la carrera nuclear que su trabajo había propiciado.
La película no solo toca los resortes de la investigación llevada a cabo para la fabricación de la bomba atómica, sino que vuelve a la temática del nacimiento y el hundimiento de una figura emblemática en los Estados Unidos; algo habitual en su historia. Según sus intereses, pasas de héroe a villano en un segundo, aunque rehabilitado en 1963 por el presidente Lyndon B. Johnson, al reconocerle con el Premio Enrico Fermi, Oppenheimer (de origen judío y sospechoso de simpatizar con el Partido Comunista) ha visto pasar su vida entre el triunfo y la tragedia con la que Kai Bird y Martin J. Sherwin subtitularon su libro, el referido American Prometheus.
Sinopsis
En tiempos de guerra, el brillante físico estadounidense Julius Robert Oppenheimer, al frente del «Proyecto Manhattan», lidera los ensayos nucleares para construir la bomba atómica para su país. Impactado por su poder destructivo, Oppenheimer se cuestiona las consecuencias morales de su creación. Desde entonces y el resto de su vida, se opondría firmemente al uso de armas nucleares.
Oppenheimer es una coproducción de Universal Pictures, Atlas Entertainment, Syncopy Production y Gadget Films. La distribuye Universal Pictures.
Ficha de Oppenheimer
País y año de producción: Estados Unidos 2023.
Duración: 180 minutos.
Dirección: Christopher Nolan.
Guión: Christopher Nolan. Libro: Kai Bird, Martin J. Sherwin. Biografía sobre: J. Robert Oppenheimer.
Dirección de fotografía: Hoyte van Hoytema.
Música: Ludwig Göransson.
Intérpretes: Cillian Murphy, Emily Blunt, Matt Damon, Robert Downey Jr., Florence Pugh, Josh Hartnett, Casey Affleck, Rami Malek y Kenneth Branagh.
Producción: Universal Pictures, Atlas Entertainment, Syncopy Production y Gadget Films.