En la segunda mitad del pasado 2019, María Ripoll estrenó Vivir dos veces, una notable y conmovedora comedia dramática coproducida por Netflix y RTVE. En el actual 2020, la plataforma está ofreciendo esta obra que nos habla, principalmente, de segundas oportunidades, pero también de un abanico de temas muy actuales, como la dura realidad de los enfermos de alzheimer, del cuidado de nuestros mayores, del influjo que en nuestras vidas están ejerciendo las redes sociales y las nuevas tecnologías, sobre todo en los jóvenes, cada vez más próximas a estas…
Un estupendo Óscar Martínez se pone en la piel de un insigne profesor de universidad que siempre ha encontrado en las matemáticas la razón de su vida y el sentido del universo. Pero en la última etapa de su trayectoria vital se enfrenta a una grave y cruel enfermedad que poco a poco va arrebatándole la memoria.
Emilio tiene una hija, Julia (la siempre eficaz Inma Cuesta), quien ha de afrontar el dolor que le produce el mal de su padre y el desconcierto de una familia que navega por aguas turbulentas (la fresca aportación de Mafalda Carbonell, en el papel de su hija, Blanca, y el desquiciado esposo, interpretado por Nacho López).
La banda sonora compuesta por Arnau Bataller acompaña de manera eficiente la trama de esta road movie metafórica que refleja la trayectoria recorrida por el viejo profesor Emilio en pos de preservar sus recuerdos, en un afán porque la nostalgia le permita rememorar una antigua relación sentimental de su lejana juventud. El guion elaborado por María Mínguez nos ofrece la oportunidad de replantearnos muchas cuestiones que por mor de lo cotidiano no somos capaces de reconocer.